La depilación es una práctica muy común hoy en día, que consiste en eliminar el vello de alguna zona del cuerpo, arrancando las vellosidades. El depilado puede llegar a ser muy doloroso, dependiendo de la zona de la que se elimine el vello. Hay áreas del cuerpo humano en las que hay mayor presencia de vellos, aunque la cantidad depende de cada persona.
La mujer suele gustar de depilar las zonas como las axilas, las piernas y todo aquel vello que no se considere propio del sexo femenino como el del bigote (bozo), la barriga, los pezones y las nalgas. Algunas suelen depilar los brazos y el vello público, pero éste último es más por elección estética, así como la entrepierna para lucir claro está el bikini.
No se conocen fuera de la protección que el vello supone para preservar el área genital, de otras ventajas de no depilarse. En cuanto a las ventajas del depilado, cada persona encontrará razones que le mueven a depilar la zona genital, y demás zonas del cuerpo. Depilarse resulta más que todo estético y una forma de sentirse más segura y adecuada por la mujer, cuando depila las ingles se asegura de no sentirse avergonzada en un momento dado por un vello que salga del bikini o la braga.
En cuanto a la zona genital, el depilarse se considera según el gusto de cada quien. Para algunos es una forma excitante para el sexo y para otros puede no resultar tan agradable, dependiendo del gusto de la pareja, la mujer o él también puede depilar zonas o toda el área genital. Las ventajas se centrarían entonces en el deseo de cada persona de sentirse a gusto consigo misma y librarse del molesto vello, aunque para otras el mismo no suponga preocupación alguna ni les parezca antiestético.